En el capítulo 1 de la tercera temporada de Black Mirror la protagonista vive obsesionada por su puntuación en un mundo en el que todo se basa en ese sistema. Tu actitud es permanentemente valorada y visible por los que te rodean. Puedes pensar que es una crítica futurista de una serie hacia las nuevas tecnologías y el abuso que hacemos de ellas pero no, no es futuro. Es una realidad palpable para los que trabajamos gestionando redes sociales de establecimientos.

Cualquiera que esté pasando un mal día puede entrar en el perfil de un cliente y destrozar su reputación a golpe de puntos. De 1 estrella de 5 pasando por el «no me gusta porque no me gusta y punto» o superándose cada día con una mayor estupidez del tipo «es mi opinión y punto«. También cualquier persona con cerebro puede hacer una valoración sobre el mismo establecimiento pero apoyándose en su percepción real y realizar una crítica constructiva -negativa o positiva- que realmente sea útil. El problema es que son minoría.

Internet es un mundo maravilloso con un fondo oscuro y deleznable. Es un lugar donde priman los titulares sobre la información completa; donde si el río suena es que lleva agua de cojones; donde cualquiera puede ser un experto espontáneo en cualquier tipo de especialidad (incluso neurocirugía); el lugar donde te pueden humillar o destruir la vida en segundos y de forma totalmente viral; donde tu reputación se basa en la popularidad obtenida en Facebook, Instagram o Twitter.

¿De verdad piensas que si compartes una entrada o pones «me gusta» en Facebook vas a ayudar a una niña de 2 años  moribunda? ¿Crees que poner «AMEN» en un comentario hará que se recauden fondos para llevar agua a un pueblo sin recursos? ¿Esperas recibir un iPhone sólo por compartir una imagen en una red social? ¿Crees que reenviando el mensaje de whatsapp a 20 de tus contactos impedirá que un fantasma vestido de payaso te mate por la noche a las 12 en punto? ¿Crees que poniendo 1 estrella a un restaurante estás siendo una persona honesta que ayuda a la sociedad con su «humilde» opinión a escoger mejor sus opciones? ¿Piensas alguna vez en las personas y puestos de trabajo que hay detrás de tus alardes de Cid Campeador de la RED?

En fin… estoy terriblemente decepcionada con muchas cosas de esta vida pero básicamente se trata de la actitud de algunas personas y sobre todo de la actitud vía teclado. Estoy segura que mirándose a los ojos la gente suele tender a ser menos gilipollas.